La crisis nacida de la no acusación del oficial Darren Wilson en Ferguson, Missouri, la semana pasada ha obligado a la Casa Blanca para impulsar la reforma de la policía nacional.
El presidente Barack Obama pidió este Lunes $ 75 millones para equipar a 50.000 agentes de policía en todo el país con cámaras corporales que estén destinados a realizar un seguimiento de sus interacciones con la población civil.
El presupuesto para las cámaras de cuerpo, anunció durante una jornada de reuniones con líderes de los derechos civiles y miembros de las fuerzas del orden, es parte de una iniciativa de tres años, $ 263 millones en la reforma de la policía que también amplié la capacitación para hacer cumplir la ley, de acuerdo con Associated Pulse. Obama planea trabajar con el Congreso el próximo año para incluir el programa en el presupuesto 2015.
El paquete proporcionaría un partido federal del 50% para los departamentos de policía locales para adquirir cámaras de cuerpo, No hay números confirmados sobre cómo muchas agencias policiales utilizan cámaras del cuerpo, pero un informe de 2013 citado por Talking Points Memo sugiere que en la actualidad la mayoría no la utilizan.
La Casa Blanca también está trabajando en una orden ejecutiva para cambiar el proceso de revisión en virtud del cual se le da el equipo de grado militar a los departamentos de policía locales y que requieren de nuevas normas para su supervisión. Talking Points Memo dice que un alto funcionario del gobierno se negó a comentar sobre si Obama apoyaría la prohibición de la transferencia de equipo militarizado a la propia policía.
La decisión del gran jurado de no procesar a Wilson provocó una explosión de protestas, disturbios y un feroz debate nacional sobre la relación entre los organismos policiales y la comunidad negra. El fervor de la respuesta parece ya haber superado las protestas del año pasado sobre la absolución de George Zimmerman después de que mató sin armas adolescente negro Trayvon Martin en 2012.
Las cámaras de cuerpo han sido compradas como una manera de ayudar a la reforma en conducta de los organismos policiales, algunos de los cuales han demostrado ser practicantes sistemáticos de discriminación racial. Una persona negra es cuatro veces más probable de ser arrestado por tener marihuana que una persona blanca, a pesar de utilizar el medicamento con una frecuencia similar. Los jóvenes negros tienen 21 veces más probabilidades de ser asesinado a tiros por la policía que sus pares blancos. Los Estados Unidos encarcela a sus minorías a una tasa mayor que cualquier otro país en el mundo, entre ellos Sudáfrica bajo el apartheid.
Evidencia sustancial sobre la base de estudios de casos muestran que las cámaras corporales pueden funcionar como una herramienta de rendición de cuentas y rápidamente disminuir la tasa de uso de la fuerza en enfrentamientos entre la policía y los civiles.
Cámaras del cuerpo que no se resolverán los incentivos estructurales más profundos que los policías tienen para vigilando, hostigando y deteniendo a las comunidades negras y marrones en todo el país, pero podrían ser una herramienta útil para frenar la epidemia de brutalidad policial que parece haber alcanzado un punto de ruptura a nivel nacional.
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