La semana pasada ha sido una de terror para Francia. Después de un alboroto de tres días en el que los terroristas mataron a 17 personas tanto en las oficinas de Charlie Hebdo y en un supermercado kosher judía, un fugitivo todavía sigue en libertad. Se estima que unos 3,7 millones de ciudadanos franceses salieron a las calles de París en una marcha de solidaridad como el ataque y sus consecuencias sigue dominando los titulares internacionales.
Sin embargo, miles de kilómetros de distancia, otra crisis Se ignoraron en gran medida. Insurgentes de Boko Haram en Nigeria cometieron una masacre de proporciones increíbles en el estado de Borno. Durante el período de unos pocos días, el grupo terrorista mató a más de 2.000 personas en la ciudad de Baga, así como 16 ciudades y pueblos vecinos, ardor comunidades enteras al suelo. Amnistía Internacional la calificó de la "masacre más mortífera" del grupo terrorista hasta la fecha, y el Guardian informa que los grupos locales de defensa dijeron que renunciaron a contar los cuerpos que quedaron tendidos en las calles.
Por cada medida objetiva, masacre vicioso de Boko Haram en Nigeria empequeñece la tragedia en Francia, en la medida que el derramamiento de sangre Nigeria ha sido descrito como uno de los peores ataques terroristas en la historia moderna. Sólo hay un problema: Con toda probabilidad, es probable que no se enteró de ello hasta ahora.
¿Dónde está la indignación internacional por estas víctimas no occidentales y predominantemente musulmanas de terrorismo? Los ataques terroristas en el estado de Borno y París se desarrollaron durante el mismo período de tiempo, pero la historia en Francia generaron más de 50 veces más historias de noticias de todo el mundo.
Este silencio no es accidental. Hay una clara doble moral cuando se habla de Western frente a no-occidental y musulmana víctimas frente a no-musulmanes de terrorismo. Ataques terroristas contra Occidente, y en contra de los no musulmanes en particular, son sensacionalistas en los medios de comunicación, mientras que los aflige no occidentales y musulmanes están normalizados y tratado como lo de siempre, lo que genera un interés publico limitado y, a su vez, las protestas de los activistas y limitada instituciones que en realidad podría afectar el cambio.
Esta discrepancia en la cobertura plantea importantes cuestiones sobre la forma en que los medios hablan de terrorismo - y si los medios de prensa occidentales que tan ferozmente diseccionados la brutal masacre Charle Hebdo verá jamás no occidental y víctimas musulmanas del terrorismo como "mournable." Y el resultado está diciendo: Informes sobre las víctimas no occidentales del terrorismo en general se pasa por alto o ignorado a menos que encajan en particular narrativa de la libertad y la civilización bajo el asalto del extremismo islámico.
Es la atención en Charlie Hebdo realmente sobre el asalto a la libertad de expresión? No necesariamente. Un día después de los 10 periodistas blancos fueron asesinados trágicamente a Charlie Hebdo y se convirtieron en mártires por "libertad de expresión", dos periodistas tunecinos, Sofiene Chourabi y Nadhir Ktari, fueron decapitados por militantes del Estado islámico en Libia y ha recibido casi ninguna cobertura por su sacrificio.
Además, el Comité de Protección de Periodistas encontró que más de la mitad de los periodistas asesinados en 2014 eran musulmanes, a pesar de que el diálogo medios internacionales del pasado año se centró casi exclusivamente en decapitaciones del Estado Islámico de estadounidenses blancos James Foley y Steven Sotloff, así como la muerte de otros periodistas blancos como Camille Lepage.
"Más de la mitad de los 61 periodistas asesinados en 2014 eran musulmanes, muchas personas que trabajan en los países afectados por conflictos como Irak, Siria, Pakistán y Somalia", escribe Rafia Zakaria para Al Jazeera América. "Pero pocos han recibido el reconocimiento o la conmemoración el concedido a los periodistas occidentales o un puñado que trabajaba para los medios de comunicación occidentales."
Si esto fuera solamente una cuestión de quién está luchando para defender "la libertad de expresión", entonces los medios de comunicación internacionales estarían honrando los sacrificios de los puntajes más no occidentales y periodistas musulmanes que han muerto en el cumplimiento del deber.
La mayoría de las víctimas del terrorismo son musulmanes y no-occidental, pero que rara vez les pagan tanta atención. Una estimación conservadora por el Centro de Combate al Terrorismo de la Academia Militar de Nueva York en West Point encontró que entre 2006 y 2008, los no occidentales compone aproximadamente el 98% de las víctimas de Al Qaeda. La mayoría de las víctimas eran musulmanes.
Un informe adicional el año pasado por el Instituto para la Economía y la Paz de Visión del Proyecto Humanidad encontró que las muertes a nivel mundial debido al terrorismo se han disparado en la última década. Ellos se concentraron en Irak, Afganistán, Pakistán, Nigeria y Siria: todos los países no occidentales con grandes poblaciones musulmanas.
El informe también vincula explícitamente el aumento de los ataques terroristas en estos países a la guerra liderada por Estados Unidos contra el terrorismo, pero los medios de comunicación sigue omitiendo explícita o pasar por alto estas víctimas del terrorismo (a menos que sus historias se pueden utilizar para alimentar la islamofobia).
Los medios de comunicación todavía ofrece una representación sesgada de los musulmanes. Por ejemplo, la narrativa medios de comunicación sobre los ataques franceses dio poca importancia a Ahmed Merabet, de 42 años de edad, guardia de seguridad argelino musulmán por Charlie Hebdo que también fue asesinado, y se centró en cambio en muchos de los periodistas y editores blancos que murieron. Por otra parte, los medios de comunicación internacionales, a veces omiten explícitamente la identidad musulmana de Malí musulmana Lassana Bathily, que salvó a los clientes durante el asedio de un supermercado kosher judía, al tiempo que reitera que los terroristas eran "islamistas". Cuando otros puntos de venta se centraron en esta distinción, lo trataron como una revelación impactante: Un musulmán quería salvar Judios! Cómo novela!
Esto está en marcado contraste con los relatos de los medios de comunicación sobre el Islam que hacen dominar los titulares internacionales. Medios de comunicación occidentales obsesionados cobertura el año pasado sobre Malala Yousafzai, una joven activista musulmán de Pakistán que fue tiroteado por los talibanes en su camino a la escuela. Muchos medios de comunicación utilizan la historia para avanzar narrativas unilaterales sobre el Islam, la opresión de las mujeres musulmanas y Pakistán en términos más generales, mientras que restar importancia a sus críticas al programa de aviones no tripulados de Estados Unidos, que no se ajustaba a estas narrativas.
Entonces, ¿qué tiene esto que ver con Nigeria? Boko Haram en los titulares internacionales en 2014 por el secuestro de 276 niñas de una escuela en Chibok en el estado de Borno. Activistas nigerianos lanzaron la campaña #BringBackOurGirls hashtag, exigiendo la rendición de cuentas por parte del gobierno nigeriano.
Pero después de dos semanas de poco o nada de cobertura, los periodistas internacionales de pronto barridos en y comenzó a describir Boko Haram como de Nigeria "talibanes", centrándose la historia de la guerra fundamentalistas islámicos "en la educación de las mujeres en lugar de las deficiencias estructurales y burocráticos de el gobierno nigeriano.
La verdadera historia de Boko Haram y las chicas Chibok no podría haber sido más lejos de la verdad. En primer lugar, las chicas Chibok, como los militantes de Boko Haram, son musulmanes, y aunque los talibanes y Boko Haram son ambos grupos terroristas que invocan la retórica "islamista", la historia de Boko Haram no podría ser más diferente a la de los talibanes. Por otra parte, Boko Haram se dirige regularmente chicos en sus ataques, pero esto también se quedó fuera de la historia.
El Occidente y sus medios de comunicación malinterpretaron la narración y se apropiaron del hashtag #BringBackOurGirls como una "guerra contra las mujeres" para justificar una presencia militar occidental ampliado en la región. Meses más tarde, ya pesar de docenas de soldados de los EE.UU., Francia, Canadá, Israel y el Reino Unido están desplegados en la región, ninguna de las chicas han sido rescatados por los militares hasta la fecha. Si la reacción mundial a masacre de este fin de semana es una indicación, simplemente hemos pasado de la batalla en curso de Nigeria contra los militantes en favor de los temas más tentadoras.
Por qué es importante. Los informes sobre las víctimas no occidentales de terrorismo suelen restringirse a menos que puedan servir a un programa en particular, y vimos que de nuevo la semana pasada con el silencio ominoso de los medios en torno a la masacre de Boko Haram de miles de víctimas en el estado de Borno. No hay narraciones ordenadas torno a esta "guerra islámica sobre las mujeres", y no occidentales fueron asesinados. Era simplemente la violencia terrorista en una escala sin precedentes perpetrados contra los nigerianos, muchos de los cuales eran musulmanes.
Todavía no estamos seguros de la escala de la violencia en Baga y pueblos vecinos todavía, pero lo que sí sabemos es asombrosa. Baga, una ciudad de 10 mil, ahora es "prácticamente inexistente", según Musa Alhaji Bukar, un alto funcionario del gobierno de la región. Cientos de cadáveres se pudren y la basura de las calles. Pueblos y aldeas enteras han sido quemadas y miles de personas han tenido que huir en el lago Chad donde se enfrentan el hambre, la deshidratación y los ataques de animales salvajes, mientras esperan el rescate de los bancos de arena inestables. Este es uno de los peores ataques terroristas en la historia, y Boko Haram dio seguimiento a que al hacer una niña de 10 años de edad, inmolarse en un mercado en Maiduguri este sábado, matando al menos a 10 personas más.
Así como las personas están de pie en solidaridad con los franceses y denunciando la violencia terrorista que trágicamente se llevó 17 vidas, también debemos ser solidarios con los nigerianos y condenar masacre de Boko Haram de 2000. La vida de los musulmanes y las víctimas no occidentales del terrorismo también son importantes, aunque la omisión de estas historias de los principales medios de comunicación puede indicar lo contrario.
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